De acuerdo a las mediciones que realiza el Departamento Provincial de Aguas en el lago Nahuel Huapi, se ha verificado un perÃodo continuo de los últimos tres años clasificados como “secosâ€, situación que no se observaba desde el perÃodo 1996-2000, con la salvedad de que el año 1997 fue un año “medioâ€.
Los primeros dÃas del mes de abril muestran una cota del lago de 767,73 msnm, muy cercano al valor mÃnimo registrado para el mes de abril de 1999, de 767,41 msnm, según los registros históricos disponibles para el perÃodo 1983-2021.
El lago Nahuel Huapi es un cuerpo de agua que refleja el estado general de la cuenca alta del rÃo Limay, y se vincula con los componentes de entrada del ciclo hidrológico, indicando un déficit de precipitaciones en general.
Pronósticos para la cuenca
Desde la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC), el Lic. Fernando Frassetto, informa que se mantiene el déficit de precipitaciones a comienzos del perÃodo hidrológico 2021-22 en la cuenca del rÃo Limay.
Las precipitaciones esperadas durante el corto y mediano plazo (abril) son de débil intensidad. A comienzos de abril aún estamos en la transición de la estación seca de verano hacia el perÃodo de lluvias y nieve que se intensifica especialmente entre los meses de mayo y agosto. El resultado de la mayorÃa de los modelos de pronóstico mantiene condiciones normales a deficitarias para el trimestre abril -mayo- junio 2021.
Las lluvias otoñales durante este perÃodo son muy importantes para la recarga de la cuenca: lagos, suelos y acumulación subterránea. Estas condiciones permitirÃan la recuperación de los volúmenes de agua necesarios para alcanzar caudales normales en los rÃos y arroyos durante el próximo invierno y primavera.
Para que se cumpla este escenario hidrológico, son necesarias precipitaciones por encima de los niveles medios en la zona andina, debido al déficit sostenido durante los últimos años, que se acentuó entre la primavera y el verano pasado 2020/21.
Los niveles actuales observados en las alturas del Lago Nahuel Huapi indican claramente la condición actual de sequÃa.
Si bien las tendencias estacionales mantienen condiciones en torno a lo normal, es necesario observar durante las próximas semanas los cambios en la configuración oceánica y atmosférica, los resultados de las proyecciones de pronóstico de precipitaciones para los próximos meses y al mismo tiempo, la vigilancia con pronósticos a corto plazo por el eventual ingreso de sistemas frontales con precipitaciones intensas que pueden impactar sobre la región.