La Asociación Trabajadores del Estado (ATE) seccional Catriel acordó un incremento de salario con un impacto del 61% hasta octubre luego de 14 horas de negociación y casi tres semanas de lucha.

El acuerdo establece un 9% en marzo, 17% en abril y mayo, 8% en julio, 8% en septiembre y 8% en octubre, al que debe agregarse $1000 de refrigerio y una gratificación no remunerativa de $20.000 en septiembre y octubre y $10.000 en noviembre.

La nueva oferta logró para el personal municipal precarizado sumas que ascienden a los 18 mil pesos y que van a pasar a ser parte de manera permanente de sus haberes junto con un bono de $3000 que se pagará en julio.

“Ha sido una paritaria histórica en la cual pudimos visibilizar la necesidad de los trabajadores, que permanecieron 18 días en la calle. La mayor herramienta ha sido la unidad que dio como fruto estos logros que hoy celebramos como clase trabajadora”, dijo Nora González, secretaria general de Catriel.

La primera oferta del Ejecutivo con salarios por debajo de la línea de la pobreza no estuvo a la altura de las circunstancias. “La oferta de la intendenta tenía una mirada muy mezquina hacia la clase trabajadora, sin justicia social en sus propósitos. Pero supimos llevar adelante este plan de lucha con la ayuda de muchos comerciantes de la ciudad, que colaboraron con las ollas populares, y a quienes les agradecemos profundamente”, señaló.

En cuanto a la indumentaria del personal, la entrega será en junio para la totalidad de las áreas municipales y la leche se dará a la totalidad correspondiente también en junio.

ATE acordó volver a reunirse en la primera semana de noviembre para evaluar la inflación hasta ese momento.

“Destacamos también el acuerdo para que no se descuenten los 18 días de medidas de fuerza. Estamos abrazando este logro, vamos a seguir recuperando salarios”, completó la dirigente y destacó la recategorización que comienza a discutirse este martes.