«La gramática no refleja necesariamente el mundo. El mundo está dividido en dos: hombres y mujeres; la gramática no lo está, es un hecho arbitrario de sedimentación secular y herencias milenarias», expresó la reconocida lingüista "
Desdoblar en masculino y femenino algunas palabras, utilizar todxs, tod@s o todes, asà como separar entre lenguaje sexista y lenguaje inclusivo, ha sido una moda promovida desde instituciones gubernamentales o asociaciones civiles, a veces practicada por algunos sectores de la población hispanohablante.
Investigadora Emérita del Instituto de Investigaciones Filológicas en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Miembro de Número de la Academia Mexicana de la Lengua y de El Colegio Nacional, la lingüista Concepción Company Company compartió con nosotros un análisis sobre este importante tema que ocasiona reflexiones y debates.
Para empezar, reconoció:
«Hay en los últimos 10 años, fundamentalmente, propuestas desde organismos oficiales, como la SecretarÃa de Gobernación, Sindicato de Trabajadores de la Educación, organismos gubernamentales, en el sentido de que hay que hacer una lengua desdoblada, en masculino y femenino -en aquellas zonas donde se puede desdoblar en masculino y femenino-, para darle respeto e igualdad a las mujeres.
«Mi planteamiento es que el respeto y la igualdad a las mujeres no se va a lograr si decimos presidente o presidenta, juez o jueza, sino que se va lograr cuando la mujer gane igual que un hombre y tenga las mismas posibilidades de acceso educativo, laboral, en salud, etc. que tienen los hombres, da igual cómo se le llame, presidente o presidenta. Todos estos organismos gubernamentales tienen manuales del buen hablar y buen escribir, del hablar respetuoso desdoblado, y entonces me dicen: “Igualdad es que te llamen arquitectaâ€; ¡no!, igualdad es que me paguen igual si soy igual de buena, que yo tenga las mismas oportunidades de acceder a ese puesto que un arquitecto, o me paguen mejor si soy mejor.
«Yo reconozco, como mujer, que hay un gran problema de desigualdad entre hombres y mujeres, un problema social, sin duda, por supuesto que lo hay; no somos minorÃa biológica, pero sà se nos trata, como minorÃa; las mujeres, apenas en los últimos 10 años, 20 años, estamos teniendo acceso a puestos directivos, a lugares que hasta ahora han sido privilegio de los hombres, eso lo reconoce cualquiera que tenga ojos, pueda leer un periódico o redes o pueda oÃr radio y televisión, eso es una realidad», advirtió Company
Fuente:www.zetatijuana.com