El presidente Alberto Fernández expuso este mediodÃa en la primera sesión de la XXVIII Cumbre de Jefas y Jefes de Estado y de Gobierno de la Conferencia Iberoamericana, que se desarrolla en Santo Domingo, República Dominicana, bajo el lema Juntos por una Iberoamérica justa y sostenible.
“Si queremos una Iberoamérica justa y sostenible, el primer paso que debemos dar es restablecer la unidadâ€, afirmó el mandatario y agregó: “Una unidad que no permita que se prolonguen bloqueos económicos que afectan a pueblos de la región. Una unidad necesaria para preservar intereses comunes en la que debemos respetar la diversidad ideológica en democracias fuertes donde los derechos humanos sean respetadosâ€.
Señaló que “la unidad de la región es una necesidad polÃtica†y que “la justicia social es un imperativo ético que la hora nos imponeâ€. Además, llamó a “reconstruir la solidaridad en la región†y a “consolidar sociedades que a todos amparen y no promuevan la cultura del descarteâ€.
El jefe de Estado aseguró que “la inclusión efectiva genera empleo, consolida el mercado interno y abre posibilidades al comercio internacional†y añadió que “todos sabemos que no hay inclusión efectiva sin polÃticas públicas de inversión social en seguridad alimentaria, educación, desarrollo cientÃfico y tecnológico, infraestructura y saludâ€.
Y continúo: “Si la desigualdad mata, el individualismo y la falta de integración nos posterga y empobrece. Debemos continuar trabajando para fortalecer los lazos entre todos los espacios de integración en un marco que preserve la institucionalidad del Estado de Derecho y respete los derechos humanosâ€.
Para el Presidente “no hay solución desde el aislamientoâ€, y destacó el funcionamiento del Mercosur, la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) y la propia Cumbre para “pensar soluciones desde el multilateralismoâ€.
La XXVIII Cumbre Iberoamericana está centrada en cuatro ejes estratégicos para el futuro de la región la crisis medioambiental, la transformación digital, la seguridad alimentaria, y la arquitectura financiera internacional. En ese marco, el Presidente señaló la necesidad de “plantear modelos innovadores que propicien el fortalecimiento de las economÃas en función de las capacidades de nuestros paÃsesâ€.
Afirmó que en materia de seguridad alimentaria y transición energética se deben “incorporar la discusión sobre la inversión y la transferencia de tecnologÃa como palancas del fortalecimiento del sistema alimentario y energético globalâ€, además de “vincular las cadenas regionales de valor e identificar nuevas cadenas de suministros segurasâ€.
“Asistimos a un escenario internacional caracterizado por elevados e insostenibles niveles de endeudamiento que condicionan el crecimiento de nuestros paÃses. Las tasas y sobrecargos que el Fondo Monetario Internacional impone a paÃses endeudados resultan abusivosâ€, apuntó el mandatario y agregó: â€Es necesario acrecentar la transparencia de las instituciones financieras internacionales y abogar por un mayor acceso a facilidades crediticias, a fin de impulsar el crecimiento y el desarrollo antes de que la especulaciónâ€.
Además, declaró que “la arquitectura de financiamiento climático multilateral debe ser justa, transparente y equitativa, basada en el principio de responsabilidades comunes pero diferenciadasâ€, y enfatizó: “No tenemos nosotros la culpa de semejante crisis climáticaâ€.
Al final de su discurso, el jefe de Estado recordó: “La integración y la igualdad son nuestros objetivos. Consolidar la región y dejar de conectarnos con el resto del mundo desde la individualidad, va a hacernos más fuertes a la hora de negociar nuestros intereses comunesâ€.
“Tomemos la decisión de unir a nuestros pueblos en pos de sus legÃtimos derechosâ€, propuso el Presidente y concluyó: “Unámonos para ser artÃfices de nuestro futuro y para que nunca más el mundo central nos postergue en las periferias de la decadenciaâ€.