En una realidad llena de polÃticos pendientes de hacer vÃdeos para redes sociales, nos desayunamos con el Senador nacional Martin Doñate, quien de boina, mate en mano y suficiente abrigo se lamenta a la vera de la ruta 6 rionegrina por el estado actual de la traza. Un nivel de caradurez que nos hace desear tener más rutas con la tenacidad de ese material facial y con algo de esa elasticidad ideológica también.
¿Qué queremos decir con esto? En abril del 2023 el Sr Doñate además de representar enfáticamente al 3er gobierno kirchnerista de Alberto Fernández, también se le dió por armarle una colectora al actual gobernador rionegrino. Es decir, los dueños del pasado y del presente de la realidad provincial. Ahora desde el costado de la ruta, en una puesta en escena total, viene a reclamar por el estado de las rutas en la provincia. Por suerte la sociedad le viene enseñando a la clase polÃtica que no es tonta, que sabe, que tiene en claro por dónde viene la mano. Que hace falta nomás googlear un poco para saber de dónde vienen las crÃticas, y quiénes son los responsables de la pestilente decadencia argentina.
El Sr Doñate se presenta en un lugar de crÃtica, haciendo ya un abuso del teorema de Baglini. El mismo Doñate que firmó el Gran Acuerdo rionegrino el año pasado para que la locomotora de la producción arrancara, pero ¿saben qué? nunca arrancó, dejando a un 44 % de rionegrinos en la pobreza. Pareciera ser que durante años Doñate estuvo durmiendo una siesta y ahora reclama la repavimentación de la ruta camino a los Menucos, sin embargo su gobierno nacional no pudo siquiera terminar la rotonda de Choele Choel , una obra que costó 12 millones de dólares, un precio digno de una ciudad como San Pablo Brasil. La ruta nacional 22, que va de Godoy a Cipolletti, sigue inconclusa, y son solo 77km. La ruta provincial 151 tampoco ha sido re pavimentada, ni hablar de la ruta nacional 23 que está en construcción desde 1994 y su costo fue de 3000 millones de dólares, y aún no se terminó. ¿Dónde estaba Doñate con su boina, su abrigo y su mate? Hoy le recrimina al Gobierno Nacional que termine con urgencia lo que ellos no pudieron hacer durante años de gobierno.
Mientras Alberto Fernández daba fiestas en Olivos y Sergio Massa imprimÃa billetes como si fuese gratis, a Doñate no lo escuchamos, ni lo vimos decir nada de los baches en cada una de nuestras rutas. Tampoco lo vimos decir nada del endeudamiento de más 580 millones de dólares de RÃo Negro, monto que representa más de un año y medio de la masa salarial de los estatales de la Provincia.
Entendemos que quizás el Senador tenga que hablarle a alguna tribuna, debe sentir que es momento de ponerse el overol y empezar a mostrar algo de sentido crÃtico, algo de cuestionamiento de la realidad argentina. Pero le queremos recordar que si estamos asà es por las acciones de su espacio polÃtico y de sus aliados.
Siempre un espejo viene bien para empezar nuevas etapas. Le sugerimos que no le tome el pelo a la sociedad, que si quiere criticar que lo haga, pero que primero venga y se haga cargo de todo lo que estuvo defendiendo antes. Que ayude y que acompañe porque los argentinos necesitamos que al gobierno nacional le vaya bien, que los polÃticos empiecen a ser parte de la solución y no del problema. Y que si las rutas están mal, que no sea caradura, que sepa bien de quién es la culpa y que además como Senador nacional ayude a buscar soluciones en vez de likes.
Es hora de despertar, exigir responsabilidad y transparencia en la gestión pública. No podemos permitir que se sigan repitiendo los errores del pasado. Nuestra Provincia y nuestro PaÃs merecen algo mejor.