El  asesinato del gobernador electo Carlos Soria el  primero de Enero del año 2012,  marcó un antes y un después en la vida de la política de Río Negro. El derrocamiento del gobierno radical de Miguel Saiz  a manos  de Soria dió fin a veintiochos largos años de hegemonía radical en la provincia patagónica y después de tantos años de democracia un gobierno peronista asumiría el comando provincial.

Con el fallecimiento de Soria debió asumir su vice en la fórmula. Un casi desconocido Alberto Weretilneck proveniente del Frente Grande que su pergamino mayor era haber sido Intendente de Cipolletti y haber tirado el tarot con destreza.

Con la voracidad de la política y el ansía de poder que lo caracteriza inmediatamente el entonces senador Miguel Ángel Pichetto salió en busca de ocupar lo que para él era una vacante. Recordemos que el gabinete armado era todo Sorista por lo que Weretilneck se encontraba sin gabinete propio y el acoso y ninguneo de Pichetto y unos cuantos más eran constantes.

Dice la leyenda que Weretilneck barajando sus propias cartas fue a consultarle a CFK  quien lo recibió en su despacho de casa rosada y la conversación fue breve y corta. Presidenta no puedo gobernar de esta manera la provincia sin saber si realmente voy a quedar o asumirá Miguel Ángel u otro peronista. Y CFK le dijo “ Yo no voy a violar la constitución por nadie ni por nada hágase cargo y gobierne bien. De ésta ficticia pero creíble conversación Weretilneck arrancó a ser el caudillo que es hoy.

De haber jurado meses antes que se pasaría al peronismo comenzó a diseñar lo que es hoy el partido Juntos Somos Río Negro. Comenzando por desprenderse de casi todos los funcionarios Soristas o convirtiéndolos a su gestión. En un gesto de poder echó a Juan Manuel Pichetto Ministro de Producción sólo por portación de apellido y con esto ratificó su posición de fuerza y mando.

Un escollo grande en la formación de este incipiente partido era el Intendente de Bariloche Omar Goye viejo peronista incondicional de Pichetto. Bariloche como mayor ejido provincial contaba con la mayoría necesaria para abordar la creación sin mayores inconvenientes de un nuevo partido.

En aras de la verdad Goye fue de los pocos dirigentes que no accedió al pedido de Weretilneck de pasarse a ésta nueva ola y se mantuvo leal a Pichetto. Los acontecimientos posteriores le hicieron saber que estaba del lado equivocado de la historia. Su salida de la Intendencia con sólo un año de gestión le abrieron las puertas de par en par para que Weretilneck fuese respetado, temido y aclamado.

JUNTOS SOMOS RÍO NEGRO un  partido creado de todas las fuerzas provinciales con disidentes y enojados radicales, frentistas, peronistas etc.  Weretilneck hizo lo que el radicalismo en veintiochos años no supo hacer. Darle lugar a los paisanos del Valle y la línea sur. Embarrarse del lodo y la nieve los zapatos, tomarse unos mates con cualquiera y sacarse el saco, también gestionar beneficios para los lugares de menos recursos.

En ésta  sutil pero constante carrera JSRN fue absorbiendo de todos lados dirigentes peronistas, radicales referentes, punteros, dirigentes barriales, incluso Intendentes de la fallida gestión Soria.

En una primera gestión sin votos propios pero ya con la gente de su lado Weretilneck apuesta a crecer e ir consolidando el partido para eso usa dos herramientas su carisma y la billetera infaltable para comprar voluntades y díscolos.

En el 2015 llega su desafío eleccionario verdadero y no deja lugar a dudas que es el gobierno que la gente quiere. Con una oposición peronista débil y un radicalismo desmembrado Weretilneck caminó las elecciones sin mucho esfuerzo y gana holgadamente.

Toda su segunda gestión lo lleva a afianzar su partido buscando cuadros nuevos y creando alianzas. Weretilneck sueña con hacer de JSRN un partido más grande en lo provincial. Los conflictos sociales y gremiales en éste período los maneja con tacto y la provincia no tiene grandes complejidades institucionales. El gobierno de Macri absorbe todos los reclamos y manifestaciones de la gente por lo cuál nadie se fija en los temas provinciales.

Tan cebado está el león de Cipolletti que quiere ir por un tercer mandato continuo cosa que la Corte Suprema de Justicia no convalidó que de no haber sido por esto estaría sentado en el sillón de Laprida 212 .

Ya como senador Weretilneck ha hecho rápidamente carrera. Al frente de una de las comisiones más importantes del senado. Consultado por sus pares en asuntos de estados como el tema de la deuda y los acuerdos con el FMI y generando acuerdos a futuros con gobernadores e intendentes nuevamente se ha sentido como pez en el agua.

A pesar de ésta solidez en el Congreso de la Nación y toda su expectativa por seguir creciendo en el mismo. Weretilneck ya tiene claro que se va a presentar para la gobernación en el año 2023. No fue fácil la decisión a pesar de la presión que le pusieron siempre sus partidarios y viudas. En el ámbito político es un pasó atrás a pesar que lo quieran justificar y Weretilneck lo sabe. El gambito que jugaba con la gobernadora finalmente terminó. Seguramente esté final no lo quería. Su desafío no era volver, su desafío era crecer mucho más en el Congreso.

Que lo decidió finalmente a truncar su carrera? Las internas dentro del partido? Las conflictos sin resolver? El estado de las finanzas? El avance de Tortoriello en JXC ? Ve debilidades en la actual conducción de Carreras? Obviamente él solo lo sabe.

Hasta hace poco tiempo el hombre distinguido en el 2017  con la Gran Cruz de la orden de Isabel la Católica  tenía otra idea .Cual será la verdadera razón que lo hizo cambiar de parecer. Muchas preguntas para contestar. Ejemplo a dónde irá la Gobernadora Carreras? Quién será el Vice? Intentará la fórmula con Pessati? Y Palmieri? Donde va Facundo López ? Hay lugar para Gennuso? Y los Arabelistas?

En fin,  el tiempo dirá si el caudillo podrá salir de su laberinto, hasta ahora lo ha logrado.