Minutos después del arribo de su bote a San Javier, destacó que se trató de “una etapa difÃcilâ€, pero motivadora. “Mi objetivo es llegar a destino, el tema del tiempo es algo adicional, para mà es un desafÃo personalâ€, resaltó emocionado.
A pesar de la pandemia supo encontrar la manera de realizar sus entrenamientos, que se intensificaron con la habilitación de algunas actividades en su ciudad desde julio, donde comenzó a ejercitarse tres veces por semana.
El joven palista es un claro ejemplo de superación personal y en esta ocasión, quiso brindar un mensaje de aliento a las personas que tengan una discapacidad, “que se animen, que cada uno ponga un objetivo; no hay que salir el primer dÃa a una competenciaâ€, aclaró.
“Yo perdà la visión a los 22 años y tuve una etapa donde estuve muy sedentario por varios años, porque cuesta encontrar personas que nos acompañen, pero de a poco uno se encuentra con gente a la que le gusta el deporteâ€, agregó.
Lejos de ambicionar un marcador, Daniel expresó que “llegar a destino va ser una felicidad enorme, es mi tercera regata, hace unos años esto era impensado para mÃâ€.
Con la sencillez que lo caracteriza, recordó que su participación en la Regata involucra “a mucha genteâ€, en primer lugar a la familia, sus amigos y a quienes acompañan en la logÃstica “porque no es fácil venir a hacer la Regata pero ellos siempre me están acompañandoâ€, concluyó.