Desde que el cabezón de Banfield dejase entrever en un programa de TV en el canal América que no iban a ver elecciones el próximo año no han pasado dos semanas. El ex presidente fue vapuleado y criticado en medios polÃticos y de comunicación por decir semejante barrabasada.
Pero mirando los hechos que se sucedieron a mitad de semana y que en algunos lugares del interior aún continúan muchos tendrÃa que disculparse con el ex gobernador de la provincia de Buenos Aires .
Lo cierto que prácticamente se ha dicho que el reclamo puede ser justo ,ahora la forma de implementarlo fue y esta siendo muy desacertada. Prácticamente todos los organismos instituciones, representaciones legales incluso partidos polÃticos y muchos más han coincidido con lo peligroso de esta protesta.
Los hechos ocurridos en la Quinta de Olivos, la actitud de familiares de miembros de la fuerza y el tono beligerante al expresar su reclamo en cierta medida hicieron recordar a un sector muy marcado de la población los tiempos en que la policÃa era parte del sistema represivo imperante. Algo que como ha dicho Taty Almeida no volverá a pasar.
La fuerza policial, ell ejército y el personal de salud han sido desde el dia cero del coronavirus los muros de contención de esta pandemia .Pero descuidar y abandonar sus puestos siendo la fuerza de contención de la delincuencia no tiene excusa . Las falencias que puede tener el estado en atención a la fuerza con referencias a salarios, equipamientos y otros reclamos pueden ser cuestionables y seguramente justos pero de ahà a la actitud donde se pocisionaron más que solidarizase la mayorÃa de las personas los repudiaron.
Párrafo aparte merece la protesta policial en RÃo Negro, porque en este caso los reclamos vinieron sobretodo de los familiares de los policÃas y aunque el ejecutivo provincial siempre ha bancado a la fuerza con equipamientos y tecnologÃa igual se pararon en la vereda de enfrente, a pesar de que la gobernadora Carreras haya accedido prontamente a sus reclamos salariales.
Las protestas en la provincia se centraron más duramente en Cipolleti, Roca y Bariloche dando a entender que la propuesta del ejecutivo no los conformaban . Aunque muchos de los referentes de la protesta se excusaban diciendo que esto para nada era un golpe a la democracia y que solo querÃan ser escuchados la sensación de sentir el sonido de bombos, platillos y sirenas no dejaron un buen sabor en la gente.
Tal vez, Eduardo Duhalde cuando habló con tanto desenfado y seguridad en animales sueltos tendrÃa algun dato ó no de lo que podrÃa pasar, eso solamente lo sabe él . Pero el fantasma para el gustó de pocos y el rechazo de la mayorÃa sobrevoló por un momento la Quinta presidencial. A buen entendedor pocas palabras.
Por Leonel Tornes Antúnez