Juan Pablo Ferrari vuelve a colarse en el selecto grupo de los tocados por la varita mágica de Weretilneck. Y no es porque el senador y el secretario de desarrollo humano sean amigos ni compinches, sencillamente es que los números de las encuestas le dan gran favoritismo al petiso ante sus posibles competidores. Va por la segunda encuesta que ratifican a Ferrari como el más conocido y considerado entre los votantes del proyecto albertista en la ciudad. 

Mientras, el Intendente Gennuso tenía como su favorita la espigada y buena moza González Abdala e impulsaba su candidatura por encima de otros postulantes. Pero hoy los números no favorecen a la morocha que tendrá que gastar más tacones en los barrios para posicionarse además de compartir más en los medios su trayectoria y trabajo. Ya las cartas están tiradas para ambos contrincantes,  entonces depende de ellos quien podría ser el vencedor. 

Otro de los medidos fue el diputado Agustín Domingo, de una vertiginosa carrera que lo llevó a la  Cámara de Baja con todo el impulso del aparato estatal y que da la impresión de estar más cómodo en el  recinto de diputados que en todos los berretines que provocan una campaña a Intendente, así que sin descartar al flaco, se le ve más lejos.

Al legislador Juan Pablo Muena ( Juampi) también le hicieron la misma radiografía que a todos. El presidente de la mesa de JSRN tuvo números favorables en la intención de los votantes, pero igual quedó bastante alejado de su homónimo, Juan Pablo Ferrari, que lideró la encuesta con un 24% mientras que el galán de la legislatura araño un 15%. Muena, un dirigente muy querido y de toda la confianza de la gobernadora aún está a tiempo de crecer en los guarismos. Si como a Domingo en su momento le ponen el aparato, sería difícil de derrotar. Es un NYC y esto tiene cierta influencia a la hora de votar ya que desde la época del Intendente Omar Goye ningún Nacido Y Criado ha gobernado  la ciudad. 

Al ex Jefe de Gabinete Marcos Barberis tambien le aplicaron la maquinita de medir sus intenciones para la Intendencia y aunque numeralmente estuvo por encima de su ex compañera en el gabinete , sus números para el cargo y el tiempo que estuvo en la gestión de Gennuso son lamentablemente muy pobres .Tal vez el que fuera  hombre de confianza de Gennuso en su momento,  esté buscando otro derrotero para su carrera. Una pena porque capacidad y conocimientos tiene para afrontar este tipo de desafíos. 

La Batalla por el sillón que dejará vacante Gennuso será muy fuerte dentro del sector interno. Gennuso visiona para el cargo alguien que le de  continuidad a  su gestión y por eso su elección de González Abdala pero en los momentos más álgidos de su segunda gestión llamaba al Petiso para las resoluciones de conflictos. Tal vez tener a los dos en el cargo sería lo ideal, pero esto es imposible. Entonces como dice un colega muy futbolero "Que gané el más mejor".